Gandia Blasco es actualmente una de las empresas españolas que apostó por el diseño y ha conseguido vivir de ello, a pesar de todos los maremotos económicos que estan sacudiendo a la vieja Europa. Ha sabido crear un concepto propio en cuanto al diseño de alfombras y mobiliario de exterior que ha exportado a más de 70 países de los cinco continentes. Desde los inicios Ventacan ha sido la empresa que ha trasladado al aluminio todas las brillantes ideas que han nacido de la cabeza de su creador: José Gandia Blasco. Os ofrecemos una breve entrevista con él.

¿Cómo se inicia la andadura de la firma Gandia Blasco?

La empresa se funda en el año 1941 como fabricante de mantas y esta actividad se mantiene hasta finales de los 80.

A partir de 1989 se inicia el proceso de cambio con un nuevo logotipo para representar la nueva época que comienza con una colección de alfombras de algodón estampadas y reversibles.

Fue en 1996 cuando al construir mi casa en Ibiza (Ca Na Xemena) y como una necesidad de amueblamiento de las terrazas, se comenzó con la fabricación de muebles que inicialmente no eran de aluminio, sino de plancha de acero perforada.

A partir de 1997 se cambian los materiales y comenzamos a fabricarlos en aluminio y madera. Fue en este momento cuando Ventacan comenzó su relación con Gandia Blasco.

¿Cuál es el concepto de los diseños y muebles que fabrica la empresa?

Los muebles, sobre todo inicialmente con Na Xemena, son formalmente muy arquitectónicos, con ángulos rectos e inspirados en la arquitectura ibicenca.

Su diseño es esencial, de formas puras, sobrias y su espíritu es claramente ibicenco, mediterráneo.

¿Qué materiales son los que más se utilizan y por qué?

Sin duda el material fetiche de Gandia Blasco es el aluminio, el perfil de aluminio, que junto con el polietileno son el ADN de la empresa y su identidad.

La razón es que son materiales contemporáneos, muy resistentes al exterior y con una estética de vanguardia.

¿Cuáles son los mercados más dinámicos y demandantes de los productos de Gandia Blasco?

Sobre todo Europa y en particular Italia, Bélgica, España, Alemania, Portugal, Turquía, etc.

También, por supuesto, Estados Unidos donde vendemos una parte importante de nuestros productos a través de nuestra filial GB USA con base en Nueva York.

En total estamos en aproximadamente 75 países de los cinco continentes y tenemos 15 showrooms monomarca.

¿Cuándo y cómo nace la relación con Ventacan?

La relación con Ventacan comenzó en 1997 al cambiar los materiales iniciales por perfiles de aluminio.

Ellos sólo fabricaban ventanas pero con el paso del tiempo y con una estrecha relación fuimos abriéndonos a la producción de muchas de las colecciones que fabricamos actualmente.

¿Cómo definiría la trayectoria de estos más de 15 años de colaboración?

Ha sido un camino largo y dificultoso que ha exigido mucho trabajo y desarrollo de todo el sistema constructivo que creamos conjuntamente.

Nuestra relación siempre ha sido de mucha complicidad e ilusión con cada prototipo que hemos ido creando.

En realidad lo que hemos conseguido en todos estos años ha sido crear un sistema constructivo propio, que no existía, que nos ha supuesto mucho esfuerzo y del que nos sentimos muy orgullosos.

¿Puede avanzarnos algún proyecto de futuro conjunto?

Tenemos varios, porque, como acabo de decir, lo que hemos creado es un sistema constructivo, no unas determinadas colecciones, que también, pero sobre todo una técnica constructiva que todavía pensamos que puede dar mucho de si.

Estamos muy ilusionados con la puesta en marcha de un sistema modular que nos permitiría hacer cualquier tipo de mueble con un solo perfil. “Con un perfil, un millón de muebles…..”