Las viviendas pasivas o de consumo de energía casi nulo son una realidad en países europeos com Alemania o Austria, y en el mundo existen ya alrededor de unos 30.000 edificios construidos con unas estrictas pautas de eficiencia energética. La orientación solar, la ventilación y la estanqueidad al aire son las principales premisas a la hora de cumplir con el llamado estandar “Passivhaus”, creado en 1988 en Alemania.

La eficienca energética de estos edificios no sólo beneficia a los que los habitan, reduciendo considerablemente la factura eléctrica y mejorando su habitabilidad, sino también al medio ambiente, ya que se reducen las emisiones de C02. De media, una casa pasiva consume al menos un 80% menos de energía en calefacción que una casa estándar: esto se traduce en una reducción de emisiones de CO2 de 2.4 toneladas/anuales por casa.

Objetivo 2020

La Directiva 2010/31/UE, aprobada por el Parlamento Europeo en mayo de 2010, endurece los requisitos de eficiencia energética en los edificios. Todos los edificios públicos construidos en Europa deben de ser de consumo energético casi nulo a partir del 31 de diciembre de 2018. Para los edificios de titularidad privada, la fecha límite es el 31 de diciembre de 2020. Una fecha, bastante próxima y que va a hacer que se transformen de manera drástica los sistemas constructivos actuales.

En el futuro marco en el que el consumo energético del edificio será considerado como una de sus prestaciones fundamentales, los edificios que no se construyan bajo este nuevo concepto serán obsoletos en menos de 8 años, y su valor en el mercado disminuirá considerablemente.

Principios básicos de la Passivhaus

Las ideas principales del estándar Passivhaus son un buen aislamiento de la envolvente del edificio (fachadas y cubiertas), reducción de puentes térmicos y ventanas bien aisladas. Además ha de ser completamente hermético al aire y ha de contar con un sistema de ventilación con recuperación de energía. Para las zonas de clima frío, esto se traduce en la posibilidad de simplificar al máximo el sistema de calefacción, ya que se hace posible mantener el confort del edificio sólo calentando el aire de renovación necesario para garantizar la calidad del aire interior. El sistema de calefacción completo puede ser reducido a un pequeño post-calentador (después del sistema de recuperación de calor). En los climas más cálidos, se debe además contemplar sistemas de control solar móviles, como celosías, parasoles o mallorquinas.

Este hecho permite obtener alta eficiencia a un precio competitivo. Aunque los costes de construcción pueden ser mayores (una media de un 14%), considerando los costes de la vida total del edificio, una Passivhaus acaba siendo más económica que una construcción convencional.

En España

En edificios existentes hay unas condiciones de partida que complican alcanzar los elevados requisitos del estándar. Por eso el Passivhaus Institute ha creado una nueva certificación que se adapta a las obras de rehabilitación. El mercado inmobiliario español prácticamente ha agotado los recursos de suelo urbanizable para construir obra nueva y cuenta con un excedente de inmuebles en malas condiciones de habitabilidad. Todavía son pocos los casos de este tipo pero en Barcelona en 2011 se rehabilitó un edificio entre medianeras construido en 1918. Antes de la rehabilitación el consumo energético para calefacción era de 171 kWh/m2/año y después ser redujo drásticamente a 16 kWh/m2/año.

Proyecto E3

Ventacan ha colaborado recientemente con la Universidad Politécnica de Valencia en la construcción del proyecto E3 – Edificación Eco Eficiente. Se trata de un prototipo de vivienda que ahorra energía desde la selección de materiales, su construcción, hasta su uso y reciclado. El proyecto está ahora en proceso de obtener la certificación Passivhaus. Nuestra empresa ha participado en la fabricación e instalación de todos los cerramientos del edificio, utilizando sistemas de perfiles con una transmitancia térmica muy baja y vidrios de altas prestaciones térmicas y acústicas. Además, ha sido la primera empresa española en aplicar el nuevo sistema de instalación de ventanas Posaclima, ideado por la firma italiana Metra, que mejora aun más los resultados en aislamiento y estanqueidad.