Tradicionalmente, las ventanas de madera son las que más se han usado por la belleza del material y su capacidad de adatación y versatilidad. Pero tienen un serio inconveniente y es su mantenimiento. Cada cierto tiempo hay que realizar una serie de trabajos (lijado y barnizado periódico) en cada ventana si queremos que ésta mantenga la misma apariencia y características del inicio. Las inclemencias del tiempo y la humedad afectan negativamente a este tipo de ventanas. Además, cuanto más nobles sean las maderas escogidas el presupuesto se dispara considerablemente.
En cambio, las ventanas de aluminio y PVC tienen un coste de mantenimiento prácticamente cero. Y sus prestaciones en aislamiento térmico y acústico son excelentes y se incrementan día a día con nuevos estudios y aplicaciones. También su precio es un factor a tener en cuenta.
La gama de acabados, colores y texturas de estas ventanas es cada vez más amplia y las opciones de imitación madera son muy populares y permiten encajar en soluciones estéticas muy diversas, tanto en ambientes rústicos como modernos.
Ventanas aluminio: lacado y sublimación efecto madera
Las ventanas de aluminio son muy apreciadas por su versatilidad, elegancia y amplias opciones de aperturas y acabados. Además, sus elevados niveles de aislamiento cumplen los estándares más exigentes de la normativa europea.
Para conseguir el efecto madera se utilizan principalmente 2 técnicas: el foliado y el lacado
Foliado:
El foliado consiste en la fijación mediante calor de una película (o folio) de color al perfil de la ventana. El folio, además de cambiar el aspecto del perfil, mejora algunas de sus prestaciones, ya que es capaz de asegurar una alta resistencia ante la polución ambiental, la radiación solar, la salinidad, la humedad, el frío, el calor y la corrosión. Para el foliado utilizamos las láminas decorativas de alto rendimiento RENOLIT EXOFOL, que protegen los perfiles de las inclemencias del tiempo y de los rayos solares.
Lacado y sublimación. Se realiza en varias fases:
- En la fase inicial los perfiles se lacan en un color base, generalmente en tonos marrones y ocres.
- En una segunda fase los perfiles se envuelven al vacío con un plástico que contiene pintura con el dibujo de las vetas.
- Finalmente un proceso de sublimación por calor permite que la tinta se adhiera sobre el lacado base, consiguiendo el dibujo de la veta y un efecto madera muy realista.
Además del color, también se pueden crear texturas y rugosidades (madera, mármol, hierro,…), que son tan realistas que cuesta distinguirlas del material original.
Opción mixta aluminio-madera: ventanas Confortwood
Para los que no quieren renunciar a la calidez y la belleza de la madera, pero no desean acarrear con los costes y el trabajo de su mantenimiento existe una solución mixta: la ventana Confortwood. Este sistema creado por Ventacan consta de una parte interior fabricada con madera natural y una parte exterior realizada con aluminio.
Tanto para la madera como para el aluminio, las opciones de acabado son muy variadas, pudiéndose realizar con un perfil de aluminio de imitación madera para el exterior y una madera noble, natural, teñida o lacada para el interior.
Ventanas PVC: el foliado imitación madera
Las ventanas de PVC son de las más populares, debido a su buen precio y sus altas prestaciones. Con este material también se puede conseguir una imitación de la madera gracias a la técnica del foliado, explicado anteriormente. Con ello se consigue replicar con asombroso realismo la apariencia estética de diversos tipos de madera.
Consulta en nuestra web todos los acabados disponibles para ventanas de aluminio, ventanas mixtas y ventanas de PVC.
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