El nuevo Plan de la Vivienda (2013-2016) aprobado por el Gobierno el pasado 5 de abril es una apuesta por el fomento del alquiler y la rehabilitación y conservación de los edificios existentes, incluyendo las mejoras en eficiencia energética y en accesibilidad. En conjunto, el plan dispone de un presupuesto de 2.421 millones de euros.
Podrán beneficiarse de las ayudas para la rehabilitación los edificios construidos antes del año 1981, siempre que al menos el 70% de su superficie tenga uso residencial de vivienda y sea el domicilio habitual de sus propietarios o arrendatarios.
Estas ayudas serán de 4.000 euros por vivienda para conservación, 2.000 euros para mejora de la eficiencia energética -que serán 5.000 euros si se reduce en un 50% la demanda energética del edificio- y 4.000 euros por vivienda para mejoras de accesibilidad.
Según el Real Decreto 233/2013, dentro del apartado de la eficiencia energética uno de los puntos principales a la hora de conceder dichas ayudas será “la mejora de la envolvente térmica del edificio para reducir su demanda energética de calefacción o refrigeración, mediante actuaciones de mejora de su aislamiento térmico, la sustitución de carpinterías y acristalamientos de los huecos, u otras, incluyendo la instalación de dispositivos bioclimáticos. En todo caso, deberá cumplirse como mínimo lo establecido en el Documento Básico del Código Técnico de la Edificación DB-HE1”. Además se subvencionará la instalación de sistemas de calefacción, refrigeración, producción de agua caliente sanitaria y ventilación para el acondicionamiento térmico, o el incremento de la eficiencia energética de los ya existentes; así como la utilización de sistemas basados en energías renovables como la energía solar, biomasa o geotermia que reduzcan el consumo de energía convencional.
Para que las mejoras sean subvencionables han de conseguir una reducción de la demanda energética anual global de calefacción y refrigeración del edificio, referida a la certificación energética, de al menos un 30% sobre la situación previa a dichas actuaciones.
A partir del 1 de junio, todos los edificios y viviendas deberán tener un certificado de eficiencia energética para que los propietarios puedan vender o alquilar. Este certificado, al igual que los electrodomésticos, tiene 7 clasificaciones que van de la A a la G, siendo la A la mejor calificación en cuanto a ahorro energético.
Este puede ser un buen momento para la renovación de las ventanas. Además de mejorar el bienestar del hogar, con un buen aislamiento térmico y acústico, y obtener un considerable ahorro energético en las facturas de electricidad, podrá beneficiarse de estas ayudas destinadas a mejorar la eficiencia energética, un objetivo que nos acaba benefiando a todos, al reducir el volumen de gases de efecto invernadero que se generan al producir la energía convencional.
Aunque en Ventacan no utilizamos ese modelo de perfil, si es de rotura de puente térmico y lleva un doble vidrio con cámara, es más que suficiente para un clima de playa. Puedes además poner algun tipo de vidrio laminado para el exterior (ver acristalamiento)